CRONISTA OFICIAL DE ZARZA LA MAYOR

El 12 de julio de 1909 nace Alberto Hurtado Florencio. Ese mismo año, el 21 de noviembre nace Norberta Requejo Borrega. Alberto y Norberta contraen matrimonio y nacen dos hijos: Miguel y Milagros. Miguel nació el 23 de abril de 1935 y Milagros nace el 13 de febrero de 1940.
El matrimonio, con sus hijos, vivieron en el Fortín y cuando Milagros tenía seis años se trasladan a la Plaza Mayor nº 13, donde arrendaron la casa hasta que posteriormente la compraron.
Al llegar a la Plaza, el señor Alberto abre un bar y a los dos o tres años, su mujer, la señora Norberta, pone una tienda de comestibles, ultramarinos, que pasados los años regenta su hija Milagros. Por su parte, Miguel, que era carpintero, atendía su carpintería en su casa, oficio que aprendió del señor Casto en la calle San Juan.
Miguel se casó con Matilde Blanco Núñez y tienen cinco hijas, Milagros, María del Mar, María Luisa, Ana Isabel y Patricia. Miguel emigró a Barcelona como muchos zarceños por esa época. Antes estuvo trabajando en el Salto de Alcántara y al recalar en Barcelona trabajó como carpintero en un astillero y como anécdota, contribuyó a la reparación de un barco de Manolo Escobar.
El negocio de Alberto Hurtado Florencio era conocido como “Bar Moreno”. Este nombre no le provenía ni por su apellido, ni por ser moreno, sino que Alberto, siendo joven, cuando se esquilaban las ovejas, ayudaba en estas tareas y los esquiladores cuando se producía alguna herida con la tijera a las ovejas le decían a Alberto: “trae ceniza Moreno”, pues la ceniza ayudaba a curar y a Alberto le llamaban así, cariñosamente y por ello el bar se denominó “Bar Moreno”.
En una ocasión Alberto había hecho un pedido de suministros para el bar y al llegar el distribuidor vio que en la puerta había un cartel nuevo que ponía “Bar Moreno”, ante lo que el distribuidor preguntó que si el bar lo llevaba ya otra gente, pues en los papeles del distribuidor rezaba “Alberto Hurtado Florencio”.
Alberto, “Moreno”, no se conformó con llevar solo este bar, durante algún tiempo, junto con Francisco (Paco) Durán Clavero, que tenía otro bar al lado del Ayuntamiento, gestionaron ambos el bar del Cine Teatro Bofill, también en la Plaza.
El bar de Moreno era un lugar muy visitado por los zarceños y en muchas ocasiones por los Guardias Civiles que vivían en casas cercanas a la Plaza, pues el cuartel de la Guardia Civil estaba en el Altozano y en el cuartel solo vivían los mandos.
Norberta, mujer de Moreno, hacía un bacalao en escabeche buenísimo que acompañado de buen vino y cervezas posibilitaba que muchos clientes pasaran un excelente rato en invierno echando una firma al brasero de picón.
En el piso de arriba, de la Plaza nº 13, había un salón para el baile, con el suelo de madera y Norberta se ponía en la puerta para controlar la entrada, pero siempre había “algún listillo” que por la reja del balcón quería colarse. El baile era los domingos y en muchas ocasiones tocaba Miguel, hijo de Moreno, la trompeta, que había aprendido a tocar con “tío Guiñapo” y la batería la tocaba Isidoro Guardado Montero, recientemente fallecido, hijo de Isidro Guardado Sánchez y de María Montero Rodríguez. Como el suelo era de madera, las muchachas se quitaban los zapatos y los metían debajo de los bancos alrededor del salón y la explosión y la alegría aparecía cuando se tocaba “La Raspa”.
Bar, tienda y salón de baile en la misma edificación, un lugar de encuentro en Zarza, un lugar de conversación y diversión de la mano de “Moreno” y Norberta y sus hijos Miguel y Milagros.
Moreno murió el 28 de octubre de 1981, Norberta, casi con 99 años murió el 22 de septiembre de 2007. Miguel nos abandona el 31 de julio de 2013.
Viendo a Milagros, seguro que en la retina de muchos zarceños permanecen esos recuerdos, recuerdos inolvidables para las generaciones de zarceños que al son de la “Raspa”, el escabeche y el buen vino, pasaron inolvidables momentos en el “BAR DE MORENO”.